Uno de los desafíos más complejos para cualquier inversor es identificar el momento adecuado para vender. En el mercado cripto, el análisis on-chain nos proporciona herramientas que permiten detectar fases de euforia del mercado minorista y períodos de venta por parte de los inversores institucionales.

En el siguiente gráfico, analizamos el comportamiento de los bitcoins gastados según diferentes cohortes de tiempo en los primeros tres estudios, y en el último, de bitcoins adquiridos. Los colores cálidos (morado a naranja) representan a usuarios con menor tiempo en el mercado, los intermedios (amarillos) indican traders, mientras que los colores fríos (verdes a azules) reflejan a usuarios de largo plazo. Las líneas verticales amarillas, naranjas y rojas indican momentos clave para considerar la salida del mercado.

En el primer estudio, aplicamos una media de 7 días a los bitcoins gastados; en el segundo, de 30 días; y en el tercero, de 90 días. Esto nos ayuda a identificar divergencias entre el gasto y el aumento de precio en las medias de 7 y 30 días, así como a observar un incremento sostenido en la media de 90 días, acompañado de un aumento de bitcoins adquiridos y menor demanda mientras el precio sigue en alza, lo cual sugiere una disminución en el interés.

Detectamos el primer punto de ventas significativas con líneas verticales amarillas. Este punto debería alertarnos, ya que representa las primeras ventas de traders y grandes ventas de usuarios de largo plazo (notable en las medias de 7 y 30 días), junto con un incremento fuerte de usuarios minoristas.

El segundo punto está marcado con líneas verticales naranjas. Aquí se percibe una disminución en las ventas de los usuarios de largo plazo (áreas verdes-azules) mientras el precio sube, lo cual indica una fase de distribución por parte de estos inversores. También se observan más ventas fuertes de traders, mientras que la compra por parte de usuarios minoristas pierde fuerza (áreas de colores cálidos).

Finalmente, las líneas verticales rojas indican una divergencia pronunciada entre el precio y las ventas, señalando un agotamiento en el impulso del mercado. En la media de 90 días, se observan picos elevados que sugieren una fuerte venta acumulada, indicando el punto más alto del ciclo de mercado. En el caso del mercado minorista, se evidencian claras divergencias que reflejan la falta de fuerza para sostener el precio.